Vivamos Juntos

Mientras leo en estos días el evangelio de Juan, observo como Cristo pasaba tiempo a diario con sus discípulos. no puedo evitar ver las cualidades humanas e incrédulas de parte de sus discípulos. Ya he escrito acerca de como los discípulos tenían una personalidad y un carácter que en ninguna manera se identificaba con la persona de Jesus. Sin embargo, Jesús pone suma atención a sus escogidos y dedica toda su vida a la transformación de sus corazones. Pero siempre me he preguntado ¿ cual fue el método que usó Cristo para transformar la vida de Pedro? que Hizo Jesús para lograr que Jacobo  ya no desee tener el primer puesto? 

A medida que sigo leyendo los evangelios sigo encontrando la respuesta. Jesús vivía con Ellos. 

El problema con que nos enfrentamos ahora es el siguiente, en nuestros días se ha perdido la costumbre de vivir juntos. A medida que los pueblos se desarrollan, crece el individualismo y poco a poco nos separamos los unos de los otros y el discipulado personal se limita a ua lectura de un folleto o un libro en un lugar específico, un cafe o un helado. Una o dos horas a la semana y ya! ¿sera que podemos conseguir los mismos resultados que Cristo?

Sería muy, muy difícil. El discipulado, tal como Cristo nos lo enseñó, no lleva un esquema. El discipulado de Jesús es informal, e incluso contracultural. Jesus pasa por un terreno abandonado y comienza una parabola de un terreno abandonado, pasa por una siembra de trigo y hace una parabola del sembrador, etc. Jesus aprovechaba el diario vivir para dar sus enseñanzas. 

Recuerdo una noche mientras estaba en el servicio de Jovenes en mi congregación cuando nuestro pastor de Jóvenes enseñaba  sobre un determinado tema. Al salir, como el estaba involucrado en la asociación de basketball local, nos llevó a ver un juego.imagínense la imagen, el lugar esta repleto de personas bebiendo fumando, las chicas vestidas indecorosamente y de repente llegamos una trulla de Jóvenes con t-shirts de nuestro grupo de Jóvenes a apoyar el equipo que el dirigía. 

A solo 5 minutos de estar allí, ya estaba discutiendo con uno de los árbitros y dándole reprimendas a los jugadores. Sin miedo alguno a lo que fueran a pensar sus discípulos. Al final, el equipo ganó. Y él ya estaba satisfecho. ¿pero que aprendí yo de esto? Aprendí que el discipulado es vivir. Si porque el hecho de que todos estabamos alli el se limitara a comportarse de una determinada manera, esto solo nos haria pensar que no era natural con nosotros. 

El discipulado se trata de vivir juntos. No me malinterpreten, no quiero decir que ya vamos a mudarnos juntos todos, pero hay un aspecto del discipulado de Jesus que podemos imitar mientras discipulamos a otros. 

Primero es que todos estamos llamados a hacer discípulos, esto no tiene excepción. Cada individuo creyente de Jesús esta llamado a formar creyentes. 

Segundo, es que si vamos a obedecer a  Jesus vamos a hacerlo a su manera. Este es trabajo de EL pues hagámoslo a la manera de EL. 

Tercero, No podemos dar lo que no tenemos. A cualquier persona que discipulemos , debemos enseñar que no somos perfectos y que nuestro deber no es el de cuidar nuestra imagen sino de guiarlos hacia la imagen de Cristo. Por lo tanto, mi meta es de vivir con elos, de manera que ellos vean como yo mismo tengo luchas y afanes y en momentos puedo depositar mi confianza en Cristo. 

Vivamos Juntos, apoyémonos los unos a otros, compartamos lo que tenemos, seamos íntimos, e intencionales en cuanto al discipulado de los demás, y enfoquemonos en magnificar el nombre de cristo y no el Nuestro pues es eso lo que él nos ha enviado a hacer. 

13 Y entrados, subieron al aposento alto, donde moraban Pedro y Jacobo, Juan, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas hermano de Jacobo.

14 Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos.

Hechos 1:13-14